viernes, 18 de julio de 2008

ACABAR CON EL MALESTAR

Ya ha pasado bastante tiempo desde que escribí mi última nota en este blog. A estas alturas debería haber sido capaz de encontrar una medicación que atenuara mi malestar y me permitiera llevar una vida normal. Sin embargo, sigo en ello. Después de diversas pruebas hoy he empezado de nuevo con otra medicación diferente. Me siento impotente, por más que pruebo medicaciones distintas ninguna resulta lo suficientemente buena como para permitirme estar moderadamente bien y seguir con mi vida. Hace tiempo que empecé a desconfiar de la medicación como medio de curación, es más, estoy segura de que no es el camino a seguir, sin embargo cuando el malestar es tan intenso no me queda más remedio que recurrir a ella. Sigo con mi terapia y ahora también he empezado a hacer ejercicios de bioenergética que me ayudan a liberar tensiones y teóricamente llegarán a ayudarme a liberar emociones. Sigo buscando herramientas para hacer el sufrimiento más llevadero. ¿Llegaré a liberarme algún día por completo de la dichosa ansiedad? A veces creo que no, que mi vida será siempre así y que no merece la pena vivirla. Otras, las menos, pienso que algún día acabará el calvario y volveré a ser la Elena de antes, llena de vida y de ilusiones, con sus inquietudes y con la fuerza necesaria para afrontar todo lo que la vida le trajera. Pase lo que pase, el tiempo lo dirá.